martes, 16 de agosto de 2016

Consejo de las Américas (Rockefeller y su dominio de la economía nacional e hispanoamericana)






¿Qué es el CONSEJO DE LAS AMÉRICAS?  

  ¿Por qué nadie habla de él?


El 24 de marzo de 1976 dio comienzo en nuestro país el fatídico proceso de destrucción de la Argentina que Juan Domingo Perón había erigido como una Nación auténticamente libre, justa y soberana. Como muestran la historia y los documentos que han ido apareciendo todos estos años, ese infame proceso –pomposa y soberbiamente autodenominado “de reorganización nacional”- fue impulsado por la minúscula oligarquía financiera angloamericana, encabezada por la familia Rockefeller. No fue casual que el ministro de Economía fuese el ultraliberal católico abogado José Alfredo Martínez de Hoz, miembro en ese entonces del Consejo Internacional del Chase Manhattan Bank. No lo pusieron como ministro por oligarca (que lo era), sino por ser empleado del banco históricamente propiedad del clan Rockefeller.

Comenzó así el “retorno a la Argentina anterior al 4 de junio de 1943”, como anunció uno de los jerarcas militares del Proceso, el general Albano Eduardo Harguindeguy. El resultado de ello fue que la economía argentina, a partir del año 1983, volvió a ser vulnerable y a las presiones y condicionamientos que históricamente impuso el imperialismo financiero británico en nuestra Patria, hasta el advenimiento de Perón.

Con la “recuperación de la democracia”, para no poner en peligro el nuevo estatus neo-colonial impuesto, el proceso político argentino se ha visto teñido de discusiones y disputas confrontativas, con enfrentamientos ideologizados y descalificatorios que han hecho que la comunidad nacional, lejos de unirse, se configure en dos, tres o cuatro bloques irreconciliables, con etiquetamientos ideologizantes y confrontativos, sin tomar en cuenta en lo más mínimo la estructura de poder político-económica-financiera neocolonial que desde el año 1983 maneja el país a su antojo, sin importarle en lo más mínimo quien gobierna, porque controla todo.

El Council of the Americas [Consejo de las Américas] fue el dispositivo económico-empresarial que utilizó la familia Rockefeller para controlar y dominar la economía argentina. Mientras que Interamerican Dialogue [Diálogo Interamericano] fue el dispositivo político utilizado para consolidar y fortalecer el control y dominio económicos.













                               
SUSAN SEGAL, Presidente de la Americas Society/Council of the Americas          --            DAVID ROCKEFELLER

1. El Consejo de las Américas es un organismo creado en 1965 por David Rockefeller, para agrupar a las más importantes empresas norteamericanas, basado en la creencia fundamental que “los mercados libres y los emprendimientos privados ofrecen los medios más efectivos para lograr el crecimiento y la prosperidad económicos de la región[1]. Como se puede apreciar, se trata del más puro y rancio dogma liberal híper-capitalista, que supone que la libertad de comercio y la iniciativa privada constituyen el mejor medio para hacer desarrollar económica y socialmente a Hispanoamérica.

Sobre la base de estas dos premisas dogmáticas, el Consejo de las Américas tiene como objetivo fundamental informar, alentar y promover mercados libres e integrados para beneficio de las compañías que forman parte de nuestra membresía, así como de los Estados Unidos y de todos los pueblos de las Américas”[2].

En realidad, se pretende el crecimiento económico de nuestros países, para sustentar los intereses comerciales del conglomerado empresarial de David Rockefeller y familia.

Desde esa época inicial y en forma paulatina ha crecido el número de miembros del Consejo, y hoy en día son más de 200 las compañías de primerísimo nivel que forman parte del nucleamiento y que “representan a la mayoría de las inversiones privadas estadounidenses en América latina. Entre ellas, tiene la primacía Chevron Corp como empresa corporativa patrón, y las que más se destacan después de ella están, entre otras, American Express Company, Archer-Daniels-Midland Company, Bank of America, Bank of New Scotia, Barrick Gold Corporation, BlackRock (accionista de YPF), Bank of New York-Mellon, Bunge Limited, Cargill Incorporated, Cisco Systems, Citigroup Inc., The Coca-Cola Company, Direct TV Latinoamerican, Elliot Management, Enel [dueño de Edesur], Exxon Mobil Corp., Federal Express, Financial Times, Ford Motor Company, General Electric Company, Goldman Sachs, Google Inc., Hewlett Packard Company, IBM Corp., J. P. Morgan-Chase, Johnson & Johnson, Kellog Co., Kraft Foods International, Manpower Group Inc., MasterCard, Mc Donald Corporation, Merck & Co., MetLife Inc., Microsoft Corporation, Monsanto Company, Nike Inc., Pepsico, Philip Morris International, Pluspetrol, Time Warner/Turner, Twitter, Visa International, Wal-Mart Stores Inc., Western Union Company, etc.

2. Pero además de las empresas estadounidenses mencionadas, se han agregado al Consejo como miembros corporativos empresas que no son estadounidenses, sino de distintas nacionalidades (por lo menos en su origen), como ser Banco Santander (“español”), Banco Bradesco (“brasileño), BBVA (“español”), Banco do Brasil, CEMEX (“mexicana”), Cisneros Group of Companies (“venezolano”), Credit Suisse (“suizo”), Deutsche Bank, Glaxo-Smith-Kline (“inglés”), Grupo Televisa (“mexicano”), Itaú Unibanco Holdings (“brasileño”), MBA Lazard (“francés”), Odebrecht (“brasileña”), Petrobras, Grupo Prisa (“español”) Repsol[3], Río Tinto (“inglesa”), Shell International, Telefónica Internacional USA, etc.

3. También se cuentan empresas “argentinas” entre los miembros de este selecto organismo propiedad del magnate David Rockefeller: Aeropuertos Argentina 2000, Banco de la Nación Argentina, Bridas Corporation (hermanos Bulgheroni), Celulosa Arauco y Constitución, IRSA Inversiones y Representaciones SA (Eduardo Elztain[4]), Latam Airlines Group, Panedile Argentina SA (constructora patagónica), Techint Incorp., etc. En el 2014 “se incorporó” a la membresía del Concejo la reprivatizada YPF. Llamativamente, fueron las administraciones “nac&pop” de Néstor y Cristina Kirchner son las que PUSIERON EN MANOS DE LA OLIGARQUÍA ESTADOUNIDENSE dos empresas de importancia estratégica para el desarrollo nacional: Banco de la Nación Argentina e YPF.   

4. Mención especial merece la firma Cleary, Gottlieb, Steen & Hamilton, estudio jurídico que ha defendido oficialmente a la Argentina en Estados Unidos, en todo lo que se refiere al tema de la deuda externa y a las negociaciones financieras encaradas por nuestro país en la Bolsa de Valores neoyorkina.

5. En la segunda quincena del mes de setiembre de cada año, los presidentes de los países hispanoamericanos son agasajados en la sede neoyorkina del Consejo, donde exponen sus consideraciones políticas y sus proyectos ante los representantes de las empresas que forman parte del organismo, tras lo cual los respectivos presidentes reciben la aprobación y el reconocimiento[5].
Aunque sean críticos de la globalización y del Alca, nuestros representantes políticos son tratados con total cortesía, como auténticos amigos. Quizás éste sea uno de los motivos que expliquen por qué, tanto en las jornadas “latinoamericanas” como en la visita a la sede central, nunca se planteen los tres temas que tanto daño han hecho a nuestros países y a nuestros pueblos: la deuda externa cada vez más impagable, la injusta y desigual distribución de la riqueza, la concentración económica mundial cada vez mayor y la primacía que ha adquirido la especulación financiera parasitaria e improductiva frente a la economía real. 

6. ¿Qué significan en realidad todos estos datos? Ante todo, que la familia Rockefeller tiene el control (en contados casos también la propiedad) de las empresas mencionadas, con lo cual es el dueño real de las mismas. En lo que se refiere a nuestro país (y a los países hermanos hispanoamericanos), gran parte de nuestra economía y de nuestro sistema financiero están en manos de la familia Rockefeller, lo cual incluye a nuestro Banco de la Nación Argentina y a la gran empresa nacional que fue YPF.

En definitiva, nuestra querida Argentina, desde 1976 en adelante y en forma imparable, se ha convertido en una COLONIA-GRANJA DE LA FAMILIA ROCKEFELLER Y DEL IMPERIALISMO INTERNACIONAL DEL DINERO, gracias al neo-liberalismo y a la socialdemocracia progresista.



     
 

  
    
Reuniones en setiembre de 2012, en Nueva York, con el Council of the Americas


José Arturo Quarracino                                      Juan Carlos Vacarezza
Sub-coordinador general                                          Coordinador General

MOVIMIENTO “PRIMERO LA PATRIA”




[1] Este dato y los que siguen estaban en http://207.21.242.176/coa/about/history.html, formando parte de la página web, en inglés, del Americas Society/Council of the Americas, hasta que fue eliminada.
[3] Como todos sabemos, esta empresa “española” perdió gran parte de su participación accionaria en YPF, pero esta pérdida fue subsanada y convertida en ganancia a través del acuerdo secreto con Chevron Corporation.
[4] Dueño de los grandes shoppings de Argentina, dueño del Banco Hipotecario, dueño de CRESUD, uno de los principales inversores en pools de siembras, tesorero del Congreso Judío Mundial, etc.
[5] Fernando Henrique Cardoso, Ricardo Lagos, Lula da Silva, Tabaré Vázquez,  Alejandro Toledo, Néstor Carlos Kirchner, Michelle Bachellet, Evo Morales, Rafael Correa, Cristina Fernández de Kirchner, Fernando Lugo, José Mujica, Martín Torrijos, Juan Manuel Santos, Álvaro Uribe, etc.

domingo, 24 de julio de 2016

Pino Solanas presentó su película en Lomas y apuntó hacia la “unidad nacional”


Por Manuel Rodríguez, Creado el 22 Julio 2016, en http://diarioconurbano.com/index.php/principales/8143-pino-solanas-presento-su-pelicula-en-lomas-y-apunto-hacia-la-unidad-nacional
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El senador nacional visitó el distrito para proyectar su film “El Legado”, que reconstruye su relación con Perón durante el exilio, y brindó su visión sobre el desafío del peronismo para la reconstrucción de la fuerza contra el imperialismo.
 
El cineasta se mostró crítico tanto con el gobierno de Mauricio Macri como con el kirchnerismo y vastos sectores referenciados en el peronismo y aseguró que su película está pensada para “el futuro y para quienes no conocieron a Perón” como una forma de volver a la doctrina original.
 
En ese contexto, Solanas expresó que más allá de las banderas partidarias en el fondo compiten “dos grandes proyectos: El proyecto nacional de San Martín y de Belgrano y el del endeudamiento, que es el actual” y bregó por la reconciliación de los sectores populares en oposición a ese esquema.
 
“Estamos en una época de una gran crisis económica y social, donde los derechos sociales y aquello que fue el pilar de la doctrina peronista está siendo avasallado. Estamos viviendo 170.000 despidos y la importación de 40.000 heladeras cuando las fabricamos y esto significa la pérdida de puestos de trabajo”, detalló en declaraciones a Aire Nativo, que es emitido por Radio URBE 97.3.
 
En el evento en el que el senador presentó su película también estuvieron presentes el juez de la Cámara de Apelaciones del Trabajo, Néstor Rodriguez Brunengo; los profesores de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, Juan Carlos Lattrichiano y Juan Carlos Vacarezza; el legislador porteño Gustavo Vera; el secretario general del Sindicato de Empleados de Comercio de Almirante Brown, Luis Monteiro; el titular provincial de Proyecto Sur, Alberto Aramouni; y los referentes locales Luis Alberto Torres y José Quarracino.
 
Asimismo, también involucró la discusión por la representación peronista y estimó: “Si bien han cambiado los tiempos y las épocas, los problemas grandes de la Argentina siguen siendo los mismos. El pensamiento y el proyecto último de Perón fue muy silenciado y después cada uno se puso la camiseta e interpretó el peronismo”.
 
“El peronismo para Perón era el movimiento, el pueblo que se sentía identificado en ese territorio cultural. Era y sigue siendo donde confluyen los sectores que se identifican con un proyecto nacional. En ese enorme movimiento hay distintas miradas y núcleos, hubo oportunistas, logreros, arribistas”, lanzó.
 
Solanas aseveró además que el movimiento peronista “está en crisis antes de la derrota en los últimos comicios” y marcó sus desavenencias con los 12 años de gobierno kirchnerista. “El proyecto de Perón no ha sido realizado y todavía espera que se realice. Acá se ha falsificado mucho el proyecto de Perón, por eso hemos hecho esta película que permite escuchar a Perón y compararlo con las medidas que se tomaron estos años”, sostuvo.
 
Frente a tal escenario, el líder de Proyecto Sur fue contundente y consideró que “estos son momentos para volver a plantear la unidad nacional, no para escarbar en el pasado”, aunque aclaró que hay que mantener una mirada restropectiva para “no cometer nuevos errores” y sería un error “no poner el caballo adelante del carro”.
 
“El caballo es el por qué y el para qué de la unidad. Cuando Perón plantea la unidad nacional es para ayudar a salir del estado dictatorial y de dependencia con los intereses imperiales, entonces nosotros tenemos que poner la mira en el gran objetivo que es emanciparnos de esa tela de araña de endeudamientos y pactos que impiden que Argentina se desarrolle plenamente”, explicó.
       
        Y concluyó: “El objetivo es que acá no quede un solo joven sin trabajo y para eso no podemos estar importando cosas que se hacen en el país. Tenemos que volver a desarrollar las industrias y sobre todo las de base. Hay que acabar con todas estas ideas que en lugar de profundizar los derechos sociales de los trabajadores la reemplazaron por la flexibilización laboral y la tercerización. Hoy el movimiento obrero está jugando una batalla fundamental, sin esa no podemos seguir adelante. Esa batalla es la unidad de las centrales, necesitamos esa unidad que se juega en agosto. Eso es algo transcendente que va a permitir al movimiento obrero defender los derechos sociales y laborales”.

miércoles, 13 de julio de 2016

9 DE JULIO 2016 - Por la Tercera Independencia Nacional

9 DE JULIO  
 
1816:
Independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata
 
1947:
Acta de Independencia Económica de la Nación Argentina
 
2016:
Por la Tercera Independencia Nacional
 
 
«¡Qué solos y qué pobres, pero qué fuertes y espiritualmente ricos en virtudes propias de nuestra raza debieron sentirse los fundadores de la patria!»
(Juan Domingo Perón, 9 de julio de 1946)
 
 
Por la Tercera Independencia Nacional
 
En julio de 1816, representantes de los pueblos de las Provincias Unidas de Sudamérica declararon la ruptura de los vínculos que ligaban a esta región con los reyes de España, la recuperación de los derechos de los que habían sido despojados para proclamarse como nación libre e independiente del rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli, y de toda dominación extranjera. Eran horas difíciles para nuestra Patria Grande, sometida a la presión de la reacción contrarrevolucionaria, de conspiraciones oscuras contra el ejército libertador de San Martín, de amenazas de invasión en el norte, de invasiones portuguesas sobre la Banda Oriental, de rencillas internas entre porteños y provincianos y de rivalidades caudillescas.
Pese a ello, los congresales reunidos en San Miguel del Tucumán creyeron firmemente en sí mismos y en el futuro de nuestra Patria. Por eso, pudieron rasgar las tinieblas y oscuridades que se cernían sobre nuestra nación incipiente, y llenos y animados del santo ardor de la justicia proclamaron nuestra Independencia política, para convertirse en los héroes tutelares e inmortales de nuestra soberanía.
 
Al presentar su Primer Plan Quinquenal, el general Perón había afirmado que entre las ambiciones y necesidades de su incipiente gobierno se contaba el anhelo de lograr la liberación absoluta de todo colonialismo económico, para rescatar al país de la dependencia de las finanzas foráneas. En julio de 1947, en la misma casa histórica en la que se proclamó la independencia patria, el gobierno del General Perón promulgó el Acta de la Independencia Económica, mediante la cual se reafirmaba el propósito del pueblo argentino de consumar su emancipación económica frente a los poderes capitalistas foráneos que hasta ese entonces habían ejercido el control y dominio de nuestra economía, bajo las formas de hegemonías económicas condenables y de los inescrupulosos nativos vinculados a dichos poderes foráneos.
Mediante este acto, se conmemoraba la gesta de 1816, actualizando sus propósitos libertadores y afianzando las raíces productivas que la fortalecían y nutrían. Se continuaba así la liberación de nuestra Patria, con una economía recuperada, libre del capitalismo foráneo, al igual que de las hegemonías económicas mundiales y de las nacionales comprometidas con éstas.
 
Hoy, los argentinos nos encontramos sometidos a la agresión integral del poder financiero internacional y a los intereses ligados a él, que desde 1976 y en forma ininterrumpida no sólo ha arrasado con la organización productiva de nuestra Patria, para volver a convertirnos en un país-granero, sino que además ha aniquilado las conquistas laborales y obreras, diluido nuestra identidad cultural y nacional y extranjerizado al extremo los recursos naturales y las finanzas de nuestra Patria. Como aliados de este criminal accionar, este poder inhumano ha contado con el aporte cipayo de dirigentes y funcionarios, pasados y actuales, que han hipotecado y siguen hipotecando la riqueza de nuestro país a la avidez extranjera mundialista, llegando a admitir la infamia que poderes inherentes a nuestra soberanía se ejerciten dentro de nuestro territorio, a través de núcleos foráneos enquistados en los engranajes de nuestra economía.
Es un contrasentido total pretender festejar los 200 años de la independencia nacional inventando feriados turísticos y encarando un enorme endeudamiento externo, política que ya ha mostrado ser estéril y contrario a los intereses y necesidades de toda nación que quiere ser soberana. Por eso, frente a esta postración económica, social y política de nuestra Patria, saqueada integralmente por izquierda y por derecha, y frente a la mentira institucionalizada que pretende hacer creer que estamos en presencia de un proceso transformador, cuando en realidad estamos recorriendo el camino de un nuevo sometimiento al imperialismo internacional del dinero, nos abrazamos a los ideales emancipadores y liberadores de nuestros Padres fundadores y a las banderas supremas y eternas de la Soberanía política, la Independencia económica y la Justicia social; nos aferramos al riquísimo patrimonio espiritual heredado de los caudillos y líderes de nuestra Nación y de la Patria Grande hispanoamericana, quienes pusieron por delante el corazón de patriotas y ofrecieron a nuestros antepasados lo mejor de sí mismos. En tal sentido, reafirmamos nuestro compromiso de levantar las banderas liberadoras y dignificadoras de nuestra Patria, para continuar y asegurar los esfuerzos y las luchas de todos los héroes y patriotas que ofrendaron su existencia para forjar la felicidad de nuestro pueblo y la grandeza de nuestra Nación.
 
Por la definitiva Independencia de nuestra Patria